Illapel es una de las 346 comunas que existen en Chile, está ubicada en la parte Sur Este de la Región de Coquimbo y en el centro de la Provincia de Choapa, de la cual es su capital.
Este pueblo es conocido como la “Tierra de Oro y de Sol” por la íntima relación de sus habitantes con la minería y por la gran cantidad de días que cada año sus cielos están despejados. También la llaman “La Ciudad de los Naranjos”, porque en antaño –y aun en la actualidad- se utilizó este frutal como árbol ornamental.
La ciudad y cada una de sus localidades están emplazadas en los valles transversales, donde los cerros y las cordilleras de Los Andes y de la Costa son protagonistas de una mirada hacía grandes montañas, algunas mineras, otras agrícolas, otras pintadas de piedras y otras repletas de cactus de diferentes variedades. A pesar de ello, el mar y la Cordillera de los Andes están distanciados tan solo por 90 kilómetros.
En Illapel habitan aproximadamente 32 mil personas (30.355 según el Censo del año 2002), de las cuales 20 mil se ubican en el sector urbano y las restantes 12 mil en las 41 localidades rurales.
De la parte urbana destacan el centro de la ciudad, donde la plaza de armas –hoy en remodelación- es la confluencia de calles, comercio, edificios públicos y pero sobre todo de los illapelinos, siendo este un punto de encuentro y paseo. Además se releva el gran número de familias, ya sea que a través de tomas, planes de emergencia y de planificación de las vivienda sociales, han construido sus hogares en empinados cerros, donde en muchas casos interminables escaleras son el único acceso.
Mención a parte merece el sector denominado “Villa San Rafael de Rozas” que hoy agrupa a cerca de 2 mil familias en la entrada sur oeste de la ciudad y que día a día logra integrarse más a la ciudad gracias al acceso a servicios como los del consultorio o escuela que están emplazados en sector.
La parte rural está compuesta al Oeste de la Comuna, principalmente por el lecho del Río Choapa o sus alrededores, por Socavón, Lanco, Limahuida, La Posada, Peralillo, Cumbre de Los Andes, Canelillo Alto, Canelillo Bajo, Cañas del Choapa, Choapa, Pintacura Sur, Pintacura Norte, Coyuntagua, Doña Juana, Ilta, Quebrada el Peral, Cuz Cuz, Tunga Norte y Tunga Sur.
Al Noreste en el Secano está La Aguada, Quillaicillo Auco, Cocou, Farellón Sánchez, La Yesera, Matancilla, Rincón del Romero y Ravanales. También están Quilmenco y la Quebrada de Gallardo.
Hacia el Este y por el Río Illapel está Asiento Viejo, las Cocineras, La Colonia, Cárcamo, La Quebrada de Cárcamo, Huintil, La Capilla, Caren, Santa Virginia, Cancha La Unión y Céspedes.
La vida productiva de esta zona se basa en la minería, tanto artesanal o pequeña, donde en años de lluvia renacen los lavaderos de oro, en las épocas de bonanza del cobre, proliferan los pirquenes y las pequeñas empresas extractivas, que además de autoempleo son la punta lanza de la economía local a través de la contratación trabajadores, transporte y otros. En la actualidad se vislumbran grandes proyectos mineros que podrían cambiar la forma de ver dicho rubro en la zona.
Por su parte la agricultura y ganadería que al igual que la minería son de subsistencia o pequeña, destacan la crianza de caprinos quienes explotan su leche para la fabricación de quesos y en menor grado la carne, de ello toma protagonismo la ancestral práctica de “Los Arreos” que implica llevar al ganado a las llamadas veranadas en los sectores verdes de la Cordillera de los Andes, donde no solo participan campesinos illapelinos, sino de buena parte de la región.
También se han generado iniciativas de agricultura más moderna para grandes plantaciones de nueces, paltas y arándanos, que buscan sustetabilidad a partir la construcción o entrada en funcionamiento de Embalses como El Bato.
La ciudad es el centro de servicios de la provincia, encontrándose gran variedad de comercio, instituciones gubernamentales, ONGS, empresas, establecimientos educaciones, entre otros.
La Tierra de Oro y de Sol es cruzada por dos ríos, siendo el principal el homónimo que en la actualidad es limite natural de la ciudad, el cual posteriormente confluye con la otra cuenca hidrográfica que riega la zona, el Río Choapa.
De la comuna destacan la Reserva Nacional Las Chinchillas y la gran cantidad de petroglifos de los habitantes originarios de la zona, diaguitas y molles, que existen en sectores como Cuz Cuz o Los Mellizos, entre muchos otros.
También se relevan casonas patronales de antiguos fundos o haciendas como las ubicadas en sector del Mirador y la Esuela Jorge Moyano en la parte urbana, o la del sector de la Colonia, Huintil, Limahuida y Farellón Sánchez en zona rurales, entre otras.
En tanto de la época industrial destacan las construcciones relacionadas con el ferrocarril o la industria Pimentón y el antiguo molino de cereales.
Gabriel Carvajal Valle
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